“Nuestras palabras tienen el poder de influenciar; las de Dios, el poder para salvar.”

La palabra de Dios dice, “los que ESPERAN en el Señor tendrán nuevas fuerzas”. ¡Espere usted en el Señor y Dios le va a dar a usted nuevas fuerzas! ¡No se canse! Dice la palabra que “los que esperan en el Señor volarán como águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán”.

lunes, 25 de abril de 2011

El aniquilador Por Dante Gebel

 El Aniquilador
Por: Dante Gebel
El sol irradia rayos cancerígenos. Los aires acondicionados arrojan al aire partículas que congestionan los pulmones. Las papas fritas tienen demasiados carbohidratos. Los vegetales tienen demasiadas toxinas. Hay hongos en cualquier suelo y microbios en los restaurantes. Algún día van a descubrir que la ensalada engorda. Nos vamos a dormir preocupados y nos levantamos obsesionados. ¿Y si nos convirtiéramos en aniquiladores de problemas?

Disco Completo ALABA (Catedral de Cristal)

Disco Completo ALABA  (Catedral de Cristal)
Dante Gebel
 

Catedral de Cristal 
ALABA 2011(en vivo)
Tracklist

01 - Catedral de Cristal - Generación de Danza
02 - Catedral de Cristal - Libre_Resplandece
03 - Catedral de Cristal - Llueve
04 - Catedral de Cristal - David Danzaba
05 - Catedral de Cristal - Con Cantos Voy
06 - Catedral de Cristal - Vamos a Cantar
07 - Catedral de Cristal - El Poder de Tu Amor
08 - Catedral de Cristal - Yo Se Que Estas Aquí
09 - Catedral de Cristal - Tengo Hambre de Ti
10 - Catedral de Cristal - Santificado Tu Nombre Es
11- Catedral de Cristal - Creo en Ti
12 - Catedral de Cristal - En Presencia de Jehová
13 - Catedral de Cristal - Alaba



martes, 5 de abril de 2011

Predica Marcos Witt - Ponga a Dios primero en su familia

Predica Marcos Witt - Ponga a Dios primero en su familia

Toda la noche

Toda la noche
Por: Dante Gebel

Hay momentos en que finalmente atraviesas la frontera de la resignación. Has hecho todo lo que se supone que sabes hacer, pero nada resulta. Lavas tus redes, luego de no haber pescado nada. Estás tan desolado, angustiado y cansado…como si hubieses estado trabajando toda la noche. Es allí, en el último round, cuando la mayoría se dan por vencidos. Pero Dios arregló una cita para que veas este mensaje y pelees tu última batalla.

jueves, 13 de enero de 2011

Dante Gebel Una Nueva Oportunidad

Dante Gebel Una Nueva Oportunidad

La vida que vivimos no es en vivo, estamos en diferido. Dios ya sabe que vamos a fallarle, los que no queremos verlo somos nosotros. Por qué la culpa nos aleja de Dios en vez de acercarnos? La fascinante historia del traidor y el traicionado. No te pierdas la escena cuando el Jesús resucitado va en busca del hombre que volvió al lugar que juró que no regresaría nunca. Un mensaje brillante.

lunes, 3 de enero de 2011

Tienes que escoger

Tienes que escoger

Decídete por lo bueno por sobre lo malo y lo correcto sobre lo agradable.


Lucas 10:42 advierte:Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.
Todos debemos escoger constantemente.  Escogemos la comida, la ropa, y  si vamos a estudiar o haraganear, obedecer o desobedecer. Nos pasamos la vida tomando decisiones que marcan nuestro destino. Por lo tanto, es necesario aprende a elegir.

¿Qué haré en la vida?
En la vida hay tres elecciones difíciles. La primera es a qué me dedicaré. ¿Cuál es tu vocación? ¿Serás médico, administrador, vendedor o empresario?  No puedes llegar a los 40 años sin saberlo. Tuve dos amigos, uno se dedicó a vagar, mientras el otro agarró sus maletas y se fue a Suiza a estudiar repostería, se esforzó. Un día pregunté a los dos sobre su percepción de la juventud. El primero me dijo: “Estoy joven, hay que gozar la vida y trabajaré cuando sea grande”. El otro dijo:”Estoy joven, es el momento para estudiar porque tengo fuerzas, construiré mi futuro”. El que escoge no hacer nada de joven la pasa muy mal de grande.
 No puedes detener el tiempo. Yo regresé a la universidad cuando ya tenía a mis dos hijos y mi empresa. Me decidí porque es necesario completar lo que se empieza y porque deseaba honrar a mi madre que se sacrificó para pagar mis estudios. Yo quería  darle el diploma y lo logré con honores aunque pasé dos años bajo una presión muy fuerte. Trabajaba de 7 de la mañana a  5 de la tarde. A las 6, iba a la universidad y salía a las 9 de la noche. Llegaba a casa a cenar  y ver a mi familia para luego recibir clases privadas de economía y finanzas de 11 de la noche a 1 de la mañana.  Por momentos, sentía que mis nervios iban a estallar. La Biblia dice que Dios honra a los que le honran, así que recibirás honra si la das al Señor.
El reloj sigue caminando, despierta porque ya cumpliste otro año más y no hay modo que te decidas. La Palabra dice que María escogió la mejor parte, es decir que había otras cosas que escoger, pero decidió bien, imítala. “Agatos” es la raíz griega de lo que significa la buena parte, lo que es bueno, consistente, usable, excelente, distinguido y honorable.

Escoger lo correcto
Filipenses 1:21 asegura: Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.
 Pablo seguramente estaba ante una elección cuando escribió esto y no sabía qué escoger porque las dos opciones eran buenas. Aunque una mejor que la otra. Vivir para el Señor era bueno y morir en Cristo era aún mejor.  Nosotros podemos afrontar esa situación. Me sucede con las corbatas cada domingo.  Me siento como ese hombre que se quedaba calvo y no sabía cómo peinarse. Al quedarse con tres pelos no se decidía para qué lado peinarlos, hasta que puso uno a la izquierda, otro a la derecha y el tercero hacia atrás.  Cuando se quedó con dos cabellos, decidió hacer camino en medio y acomodó uno a cada lado de su cabeza. Finalmente, al quedarse con un solo cabello, le era imposible decidir cómo peinarse y prefirió quedarse despeinado.  En algún momento  somos más indecisos que una mujer en una zapatería. Al final sale con los zapatos que estaban en oferta aunque no le queden.
Cuando me acababa de convertir y asistía al grupo, veía muchas jovencitas de mi edad que era posibles candidatas a novias pero cuando vi a Sonia, la decisión fue instantánea. Ahora cumpliremos 25 años de casado.  Hay jóvenes que no se deciden. Se pasan de maduros ya que llegan a los 40 años y sienten que no han encontrado a la mujer ideal. ¡Déjate de cuentos y decídete!
Pablo no sabía qué escoger. Ir con el Señor es muchísimo mejor pero quedarse era más necesario porque debía orientar a los seguidores del Señor.  Puede ser que se nos presente la oportunidad de escoger entre lo bueno y lo correcto. Intentando ponerme en el lugar de Pablo, seguramente dijo: “Es  mejor que me quede por ahora porque de todas formas, ya soy salvo y nadie me libra de ir al cielo cuando muera”.  Escogió lo correcto porque era mucho mejor ir ante la presencia del Señor de una vez, especialmente porque él mismo contó que fue víctima de persecución, azotes y pedradas.  Aún así, dejó lo muchísimo mejor para después y escogió lo necesario.
Dios quiera que nos dé el carácter para escoger lo más necesario siempre, para luego recibir lo mejor.  Yo le digo: “Dame larga vida porque sé que estoy condenado a entrar al cielo por Tu gracia y sangre,  así que espero poder anunciar Tu Palabra a la próxima generación hasta que ya no me queden fuerzas”.  Quiero tener la oportunidad de contar cómo ocurrió ese avivamiento, cómo se convirtieron los predicadores y el Reino se extendió.  
Por momentos, parece que la vida te ofrece cosas mucho mejores, como abandonar el grupo pero permanecer en más necesario. No abandones a  tu gente. Sean 2 ó 15, debes estar para ellos siempre. En la vida te pueden ofrecer oportunidades que parecen mejores pero es más necesario decidir correctamente.  Tenemos el ejemplo de Lot y Abraham. El primero escogió incorrectamente. Se fue con su familia a la llanura, un lugar cómodo cerca de la ciudad pero fue la peor decisión porque todos se perdieron, sólo él logró salir con vida. Escogió lo que era muchísimo mejor pero no lo necesario.  A veces nos vamos por la primera salida, la cómoda pero no es lo mejor para tu futuro y lo sabes, eso es lo peor.
Tú decides perder tu tiempo escogiendo lo incorrecto porque tarde o temprano deberás regresar sobre tus pasos y rectificar el error. Los estudiantes deben esforzarse durante todo el año, cuando es el momento porque si pierden el tiempo, igual deberán corregir su mala decisión y estudiar cuando ya todos están de vacaciones. ¿Qué necesidad hay de eso si tienes el tiempo correcto para hacerlo? No seas necio, sé inteligente.  Es mejor trabaja duro y esforzarse porque hay que hacerlo, de lo contrario las metas nunca se verán alcanzables y duplicarás tu esfuerzo.  
Escoge siempre lo correcto cuando estés ante dos opciones que te agradan. Los cristianos escogemos de acuerdo a nuestros principios y valores; luego, de acuerdo a nuestras posibilidades y por último dejamos los gustos.  En el vestir por ejemplo, primero hay que evaluar si la prenda que deseamos usar es adecuada según los principios de decencia y virtud, luego debemos ver si podemos adquirirla y por último, escoger la que nos gusta de las que ya tienen las condiciones anteriores.  No te dejes llevar por la moda. Ahora está “in” enseñar el calzoncillo, pero piensa que no te gustaría ver a tu hija enseñando el calzón.
Respecto a los tatuajes, no es de cristianos tatuarse porque la Biblia dice que no debes profanar el templo de Dios. Alguno dirá: “Pero he visto cristianos tatuados cantando alabanzas en un canal de TV”. Entonces les respondo: “eso solamente demuestra que las personas que viste en la TV no tiene padres ni pastores que les digan lo que es correcto”.  ¿Puedes imaginar a tu pastor con un jeans ajustado? Claro que no porque dudarías de su tendencia sexual. Ahora se les llama gays a los hombres con desviaciones hacia lo femenino, pero sin importar cómo se les llame, su conducta es una perversión.  Aún así, el Señor los ama y les predicamos la Palabra. Yo personalmente he predicado en la zona roja de mi ciudad Guatemala. Una noche me fui a repartir biblias y tratados a las prostitutas,  travestis, homosexuales y lesbianas. Sentí un poco de angustia porque una patrulla se detuvo a mi lado justo en el momento que un joven travesti me decía: “Yo sé qué estás repartiendo porque mi papá es pastor”.

¿Con quién vivirás, cuál será tu destino después de la muerte?

El Salmo 119:26-32 pide: Te he manifestado mis caminos, y me has respondido;  Enséñame tus estatutos. Hazme entender el camino de tus mandamientos,

    Para que medite en tus maravillas. Se deshace mi alma de ansiedad;

    Susténtame según tu palabra. Aparta de mí el camino de la mentira,
    Y en tu misericordia concédeme tu ley. Escogí el camino de la verdad;
    He puesto tus juicios delante de mí. Me he apegado a tus testimonios;
    Oh Jehová, no me avergüences. Por el camino de tus mandamientos correré,
    Cuando ensanches mi corazón.

La persona de este Salmo tomaba sus decisiones aunque le pedía a Dios que le enseñara. La segunda decisión importante es con quién viviré el resto de la vida. Cuando acababa de nacer en Cristo, cortejaba a una joven que no era cristiana, hasta que pensé: “Momento, estoy equivocado, dije que amaría Dios con todas mis fuerzas y no lo estoy cumpliendo”. Entonces,   fui a mi dormitorio, me hinqué llorando y le dije con todo dramatismo: “En tus manos encomiendo mi espíritu, no aguanto, es doloroso negarme a mi deseo pero haré lo correcto”.  Me levanté y fui a una vigilia donde vi a Sonia por primera vez.  Yo estaba orando, concentrado en un canto que decía: “Buscarte sólo a ti Señor, seguir tu caminar y no mirar atrás”. En ese momento Dios habló a mi corazón: “Voy a resolver  todo lo de tu vida, incluyendo lo de tu mujer”. Justo en ese instante, Sonia apareció frente a mí, tomando un chocolate caliente. Luego la vi en el servicio del domingo, le ofrecí asiento, platicamos y ya no la dejé escapar. Ella era la respuesta de Dios para mi vida. Escogí lo correcto y fui recompensado.
No saber escoger se vuelve un patrón de conducta que se convierte en necedad. Te vuelves necio tomando malas decisiones continuamente y no aprendes de tus errores. Es como si te gustara sufrir.  Deja esa actitud y busca sabiduría de las malas decisiones. Para evitarlas, mira hacia el futuro e imagina las consecuencias de la decisión antes de tomarla. Si lo que ves es malo, busca otras alternativas.
La decisión de qué harás, solamente tú puedes tomarla. Escucha a tus padres aunque no te guste, muchas veces, las personas que nos dicen lo que evitamos escuchar son quienes dan un buen consejo.
Para escoger a tu pareja, busca a la persona con quien puedes vivir, no con quién quisieras hacerlo. Los jóvenes escogen a la novia como otra marca a exhibir y lucir pero no es lo correcto. Tampoco es malo que busques una joven guapa, pero si no pueden vivir juntos, es mejor buscar otra opción. La belleza se acaba o por lo menos se arruga, es cuestión de tiempo. Para Sonia tal vez no soy el más guapo, seguro pudo conseguirse otro más alto pero soy su hombre, con quien puede vivir. La hago reír y somos felices al lado de nuestros hijos. Ella sí es hermosa y además, puedo vivir a su lado, ¡no puedo pedir más!
 La tercera decisión importante es a donde voy a parar cuando muera y  la opción correcta es junto a Jesús. Él es la vida eterna y la esperanza de gloria en nosotros.

Aprende a escoger
En Isaías 7:14-16 dice la profecía del señor Jesús: Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel. Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, la tierra de los dos reyes que tú temes será abandonada.
Jesús aprendió con la comida los principios para escoger. Seguramente entre la manteca y la miel, se quedó con la segunda. Escoger implica desechar algo, hacerlo a un lado para quedarse con la otra opción. Antes de decidir, pregúntate qué es lo mejor entre lo bueno. Luego identifica  qué es lo correcto y quédate con esa opción.  Desecha lo malo y quédate con lo bueno.
Hasta escoger la comida es un problema. Si quieres aprender a decidir, ejerce tu voluntad en cada comida. Selecciona los alimentos que te hacen bien y elimina los que hacen daño. Ese en un buen ejercicio de carácter. 
Deuteronomio 30: 19  aconseja: A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac  y Jacob, que les había de dar.
Aprovecha cada oportunidad para mejorar tu dominio propio que tiene relación con lo que escoges. Deja tus gustos de último, porque lo primera a considerar son los valores. Si lo haces, Dios te dará el gusto, basándose en lo bueno.
De lo que escoges depende el futuro de tus hijos. Tus decisiones afectan a alguien que ni siquiera ha nacido, así que toma conciencia y no seas egoísta.  Escoge para experimentar la bendición que Dios juró dar a tu descendencia.  Él cumple pero la abundancia de bendición depende de tus decisiones.   Pídele que te enseñe a escoger siempre lo correcto, bueno y santo. 

Videos


Tienes Que Escoger Parte I



Tienes Que Escoger Parte II



Espero les sea de utilidad mil Bendiciones

jueves, 23 de diciembre de 2010

Cash Luna: Por Dios y por alguien

Cash Luna: Por Dios y por alguien 

  1 Samuel 17:41-51 relata cómo Goliat amenazaba al ejército de Israel y a David a quien decía: Ven a mí, y daré tu carne a las aves del cielo y a las bestias del campo. Pero David le respondía con palabras similares: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado. Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel. Y sabrá toda esta congregación que Jehová no salva con espada y con lanza; porque de Jehová es la batalla, y él os entregará en nuestras manos. Luego David lo venció con una piedra que tiró con la honda, para luego tomar la espada de Goliat y cortarle la cabeza. Entonces, los filisteos huyeron.
Esta historia tiene muchas enseñanzas, incluyendo el consejo de sacar siempre una lección de cada experiencia de vida. La victoria y la derrota nos hacen crecer. David lo hizo notar cuando dijo que todos aprenderían que la victoria es del Señor, con o sin espada.
Lo primero que debemos descubrir es que la pelea no es con armas y violencia porque es espiritual.  En ese pasaje, no significa que fuera malo luchar con armas porque Dios tenía Su ejército y de hecho, David utilizó una espada, la del mismo Goliat, para rematarlo. Lo que debemos comprender es que la lucha es de palabras y fe. Diariamente nos enfrentamos a una batalla ante lo que escuchamos y hablamos. Lo malo se nos presenta tan grande como Goliat y tenemos dos opciones, usar nuestra fe para huir o para dar la cara porque estamos seguros que por su gran tamaño, no fallaremos  y derrotaremos la amenaza.  Justamente eso fue lo que sucedió, el ejército decía: “Siendo tan grande nos va a ganar”, mientras David decía: “Siendo tan grande no voy a fallar”.
Palabras poderosas
David ganó la batalla con las mismas palabras de temor que Goliat utilizó durante cuarenta días para infundir miedo en el pueblo de Israel.  Era imposible que un ejército no venciera a un solo hombre, por grande que fuera, como era imposible que ese hombre solo venciera a todo un ejército. Así que se libró una batalla de amenazas y Goliat estaba ganando por su insistencia.  La victoria depende de nuestra fe, tenacidad y la percepción que tengamos del enemigo.  Muchas veces somos como ese ejército que se dejó engañar por las mentiras del gigante, percibimos equivocadamente la dimensión del problema  y nos dejamos vencer sin luchar. Aprende a percibir y concluir algo desde la perspectiva de la fe que te ha dado el Señor, de esa forma, no te rendirás.
El diablo dice tantas veces: “te destruiré” porque quiere convencerte, pero realmente no puede hacerlo. Si pudiera, actuaría y no diría nada. El fracaso y la enfermedad te atacan porque te dejas convencer, por el contrario, si tienes la certeza de que eres un vencedor, ningún gigante tendrá poder sobre ti.   Cuando te sientas atacado por un mal pensamiento, lucha contra él, convencido de que lo negativo no sucederá.  Al enemigo no se le vence con piedras, jabalina o ejércitos, sino con palabras y pensamientos de victoria.  David escuchaba las amenazas de Goliat y se las devolvía tres veces más fuertes.  Atrévete a  amenazar al enemigo  y verás que Dios es quien gana la batalla por ti.  
Ver y escuchar lo bueno
1 Samuel 17:24 explica: Y todos los varones de Israel que veían aquel hombre huían de su presencia, y tenían gran temor.
Lo que escuchamos y vemos cambia nuestra percepción de la realidad, influencia lo que decidimos, decimos y hacemos.  Los israelitas escuchaban un discurso de maldad contra ellos y terminaron por creerlo. La situación del mundo ha sido difícil. Especialmente en nuestro país Guatemala donde hemos afrontado una crisis muy fuerte, pero en Casa de Dios estamos construyendo un templo para el Señor porque nos dejamos influencia por Su promesa y no por lo que vemos. Guatemala y las naciones son de Cristo y necesitamos un lugar muy grande para recibir a esas multitudes que se acercarán a Sus pies. Ante una misma situación, unos deciden ver fracaso y otros, oportunidades. Tú decides lo que ves, no decidas ver lo malo y retroceder, atrévete a ver las promesas y avanzar.  Bendito Dios que está con nosotros y nos permite hacerlo.  
 Hacer el bien por Dios y por alguien más
1 Samuel  17: 25-27 cuenta lo que ofrecieron a quien venciera a Goliat: Y cada uno de los de Israel decía: ¿No habéis visto aquel hombre que ha salido? El se adelanta para provocar a Israel. Al que le venciere, el rey le enriquecerá con grandes riquezas, y le dará su hija, y eximirá de tributos a la casa de su padre en Israel. Entonces habló David a los que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente? Y el pueblo le respondió las mismas palabras, diciendo: Así se hará al hombre que le venciere.
David no se sintió motivado a luchar por las riquezas porque él las podía conseguir con su capacidad y esfuerzo. Tampoco lo motivó la idea de recibir a la hija del rey, aunque seguramente era muy guapa, porque él también era de hermoso parecer y valiente, así que podía conseguir a la mujer que quisiera. Lo que realmente le motivó fue el beneficio que podía dar a su padre al lograr que le exoneraran los impuestos. Eso era lo único que solamente podía conseguir a través del rey, todo lo demás podía obtenerlo con sus propias fuerzas.
Entonces, pidió que le repitieran esas promesas para estar seguro y animarse a la batalla.  Muchas veces actuamos de la misma forma porque desde niños nos programaron para creer rápidamente en lo malo y dudar de lo bueno. No sé porqué somos así, probablemente el sistema educativo de la familia y la sociedad nos condicionan o somos pesimistas por naturaleza, pero debemos vencer esa actitud negativa.  Si alguien te llama para decirte que tengas cuidado porque te pueden secuestrar, pronto tomas precauciones, pero si alguien te dice que te alegres porque seguramente te aumentarán el sueldo, dudas y desconfías.  Las malas noticias se saben más rápido que las buenas.  En el mundo de la publicidad, muchas marcas de prestigio se han perdido por rumores, sin importar cuántos buenos testimonios existan.
Quienes desean algo por beneficio propio, difícilmente lo logran, pero quienes desean beneficiar a otros, alcanzan el éxito. Hacer algo solamente por ti, no es suficiente motivación. Por el contrario, las fuerzas nunca se agotan cuando el deseo de actuar se sustenta en el amor a Dios y el beneficio de muchos. David se levantó a vencer a Goliat por amor a su padre porque sabía el mandamiento: “Honra a tu padre y a tu madre y te irá bien, serás de larga vida sobre la tierra”. Nadie que tenga algo contra sus padres podrá ser un digno conquistador.  Debes honrar a tus padres sin importar lo que hagan o cómo te hayan educado. David honró a su padre y fue fiel aunque se decía hijo de pecado, fue el único hermano al que no escogieron para formar parte del ejército y lo tenían trabajando como pastor. El amor que tuvo por su padre lo promovió y lo convirtió en rey.
1 Samuel 17: 33-35 explica la honra de David hacia su padre: Dijo Saúl a David: No podrás tú ir contra aquel filisteo, para pelear con él; porque tú eres muchacho, y él un hombre de guerra desde su juventud. David respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada, salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo hería y lo mataba.
Su motivación para pelear con bestias era salvar lo que pertenecía a su casa. No dijo: “estoy cuidando mi herencia”. Cuidaba los intereses de su padre, no los suyos. Jesús también dijo: “En los negocios de Mi Padre me conviene estar”.  Todo sería mucho mejor si actuáramos por amor a los padres y aprendiéramos a honrarlos. Mi madre me decía: “Estudia y esfuérzate porque tú serás el beneficiado”. Pero yo nunca me lo creí y me gradué de la universidad por ella, para honrar su esfuerzo y sacrificio.
Los grandes libertadores y líderes del mundo lucharon por un ideal porque deseaban beneficiar a muchos. Quienes pelearon contra el racismo tenían la visión de lograr una sociedad más justa y solidaria. Muchos empresarios han alcanzado el éxito y la fortuna al innovar o descubrir algo que ayuda a millones. Los grandes hombres de la historia no han pensado en el beneficio propio, sino en el de los demás.
Cuando el pueblo de Israel peleó contra los madianitas, su grito de guerra fue: “Por Jehová y por Gedeón”. Lucharon pensando en la victoria para Dios y para su líder. Ruth le respondió a su suegra Nohemí: “No me insistas más porque vive Jehová que no te dejaré, tu Dios será mi Dios, tu pueblo  el mío. Donde vayas, yo iré, donde mueras, moriré. Vive Jehová y aún me añada que sólo la muerte nos podrá separar”. Ella actuó correctamente para honrar a Dios y a Nohemí que la necesitaba.  Actúa siempre pensando en las personas que se beneficiarán con tu buen proceder. Aprende a  vivir honrando a Dios y a otros.  No finjas espiritualidad diciendo que vives sólo para Dios porque Él te pide que lo demuestres entregándote a tu prójimo. Jesús decía: “Por amor a vosotros me santifico”.   Yo soy pastor por Dios y por mi congregación. Vivo en santidad porque amo al Señor y a mis ovejas que confían en mí. Lo mismo espero de todos ellos porque somos un pueblo y tenemos mutua responsabilidad. Si mi objetivo fuera otro, me dedicaría a dar charlas motivacionales  y me pagarían muy bien por hacerlo. Mi familia y yo llevamos una vida dedicada al servicio porque tenemos fe en el mandato del Señor.  En Casa de Dios buscamos la excelencia por amor a Dios, a nuestro país y la congregación. 
Pablo le dijo a Timoteo: “Aviva el don de Dios que está en ti que te fue dado por la imposición de mis manos. No te avergüences de Jesús ni de mí”.  Con estas palabras le recordaba que él le había dado lo que tenía en su interior y debía compartirlo.  Siempre busca hacer las cosas por Dios y por alguien más.  Solamente el amor compartido es capaz de dar frutos que beneficien a muchos.

Cash Luna: Por Dios y por alguien   Video